En el contexto de su campaña "Ahorremos agua, ¡Es vida!", la Superintendencia Nacional de Servicios de Saneamiento (SUNASS) saludó que el Municipio de Carmen de la Legua-Reynoso haya prohibido la instalación de piscinas portátiles o pozas de agua en la vía pública de ese distrito chalaco.

La medida fue tomada con el objetivo de evitar que las piscinas se conviertan en focos de transmisión del virus chikungunya, al no contar con sistemas de recirculación y aplicación de desinfectante, lo que podría ocasionar que la carga microbiana, parasitaria y viral del agua utilizada aumente considerablemente, volviéndose un peligro para la salud pública.

"Las personas que incumplan con esta ordenanza municipal podrán ser multadas y se les decomisará las piscinas domésticas sin importar el tamaño ni las características de estas estructuras que desperdician agua y además obstruyen el tránsito de vehículos y peatones, y ensucian las pistas" comentaron voceros de SUNASS.

La ordenanza evitará también el despilfarro de agua que se registra durante la época de verano en la capital, dado que según cifras de Sedapal, en febrero del año pasado el derroche de agua en Lima y Callao alcanzó los 120 mil metros cúbicos, cantidad que equivale al llenado de 30 piscinas olímpicas.

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