Dos sectores de pintura mural de gran formato, que datan del siglo XVI, fueron descubiertos en la parte superior del presbiterio del templo de San Blas durante trabajos de desmontaje de pintura de caballete y marquería dorada a cargo de especialistas de la Dirección Desconcentrada de Cultura, Cusco. La pintura mural descubierta, que se encontraba tras los lienzos, corresponde a la decoración primigenia que tuvo el templo.
 

En la pintura mural se encuentran representados los cuatro evangelistas de la religión católica: San Marcos y San Juan sosteniendo un medallón con el anagrama de Jesús, y San Mateo y San Lucas con el medallón con el anagrama a la Virgen María.
 

Los murales se encuentran en muy mal estado de conservación, por lo que se programarán trabajos de consolidación de enlucidos y policromía con la finalidad de controlar y reducir el deterioro, precisó el responsable del componente de Obras de Arte, Carlos Fernández Ocampo.

El templo de San Blas fue intervenido en 1984. Sin embargo, dichas intervenciones fueron superficiales y no permitieron evidenciar las pinturas murales existentes, que ahora serán trabajadas por los especialistas.
 

Este hallazgo "impresionante", a decir de la arquitecta residente de la obra, Karinne Siancas, motivará la modificación del proyecto de inversión pública, ya que no se había considerado en el expediente técnico la restauración de la pintura mural hallada.
 

Los trabajos de restauración y puesta en valor del templo de San Blas registran un avance físico del 60 %, y se ha destinado un presupuesto de más de 5 millones de soles del dinero directamente recaudado por la institución cultural.

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