“Me indigna porque este (la presunta concertación ilícita de empresas constructoras para repartirse obras públicas que habrían incluido el pago de coimas) es un hecho que la SUNAT fácilmente pudo detectar. La salida de la coima no es de la ganancia (…), eso es inverosímil. La coima sale con facturas falsas, facturas de favor, de servicios inexistentes, y eso con las nuevas tecnologías es fácil de detectar”, dijo para el Informativo José Verona, experto en temas tributarios.

En ese sentido, Verona deslizó la idea de que esta “falla” habría sido más bien intencional, de intereses políticos por parte de actores a los que no les convenía se audite a las empresas implicadas.

“¿No nos va a causar sorpresa que una de las más grandes empresas (Odebrecht) no fue fiscalizada en esos años (periodo de Ollanta Humala, donde se hicieron las principales obras del Club de la Construcción)?  Ojo, es una decisión política de fiscalizar a quién sí y a quién no, la que falló. Una cosa es que los auditores no hayan detectado y otra que no haya salido orden para fiscalizar”, sostuvo.

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