“Nosotros trasmitimos la cultura afroperuana desde nuestros ancestros”, señala el docente e investigador del folclore afroperuano, Lalo Izquierdo, quien en “Qué fue de tu vida” nos relata que, de la mano de Luis Banchero Rossi, el empresario pesquero, quien subvencionaba a Perú Negro por los años 70, pudo ampliar sus conocimientos de la historia afroperuana y realizar una amplia investigación a nivel nacional con los afrodescendientes.

“Él nos llevaba historiadores como Willfredo Kapsoli y libros de otros investigadores, por lo que decidió hacer una investigación in situ, y lo hicimos. Fue en ese recorrer que adquirimos bagajes de cultores como: músicos, cantantes, percusionistas, decimitas respecto a la cultura afroperuana que nunca nadie había comentado”, detalla Izquierdo.

Cuenta, el también músico y percusionista, que de todo el trabajo realizado en esa investigación salió una metodología práctica para la enseñanza que hasta hoy se busca impartir.

“Así es como nació la división de los ritmos de cajón peruano que son 5 de festejo y 5 de landó y ello sirvió para conocer que la percusión era un sistema de comunicación a distancia y otro sistema de lenguaje sin palabras que llevaba las negritas en sus trenzas, que eran las rutas de tránsito entre los congéneres y los palenques”, ilustró en Nacional.

Para el talentoso coreógrafo y zapateador peruano, mientras se siga reivindicando la cultura afroperuana, los términos (negro o negroide que están en el diccionario de la Real Academia Española) no deben de afectar, mientras más informaciones se brinde, más acogida y conocimiento de la historia afrodescendiente se tendrá.

D.B.D