Como parte de su programa de resocialización de los internos de las cárceles de todo el país, el Instituto Nacional Penitenciario y la Asociación Dignidad Humana y Solidaridad premiaron a los internos ganadores del Concurso Nacional de Poesía Hubert Lanssiers en el que participaron 266 escritos de 69 establecimientos penitenciario.

En diálogo con EntreLibros, Gilberto Vargas, ganador del primer puesto con su poemario Lo que usted diga, señor Juez y Martín Luna, ganador del segundo puesto con el poemario Antiplegarias y versos apócrifos, hablaron sobre el proceso de creación de ambas producciones literarias y sobre la importancia de la literatura en su proceso de liberación personal.

“Este libro habla sobre el proceso judicial de los internos que llegan a las cárceles. Hay inocentes y culpables, pero todos pasan por la experiencia de ser juzgados en la Corte, por un juez, quien muchas veces se siente Dios al sentenciar. Este poemario está escrito con dolor y rabia, pero entre sus páginas podrán encontrar también un tono de sátira que no dista mucho de la realidad”, agregó Gilberto Vargas, quien hoy en día ya se encuentra en libertad.

Por su parte, Martín Luna, ganador del segundo puesto del concurso contó su experiencia sobre lo que significa para él la lectura.

“Para mí ser libre es leer y escribir. Me faltan 16 años en prisión, pero poder dedicarme a escribir me hace sentir feliz y creador. Mi poemario Antiplegarias y versos apócrifos, habla sobre el encuentro que tenemos con Dios. El sufrimiento que está de por medio y la duda sobre su existencia”, finalizó.